La cerveza puede ser consumida de forma moderada dentro de una dieta equilibrada. De hecho los consumidores habituales y moderados de cerveza tienen una composición corporal más adecuada. Solo hay que evitar los excesos, no comer ni beber demasiado (que el consumo sea moderado es muy importante) y moverse lo suficiente para no engordar bebiendo cerveza.
Las calorías de la cerveza
¿De dónde provienen las calorías de la cerveza? Una de sus fuentes de calorías es el alcohol por lo que a más contenido alcohólico, más calorías tendrá. Aun así no es la única fuente ya que las calorías que pueda aportar una cerveza también dependen en parte de los tipos de cereal, métodos de cocción y/o ingredientes añadidos. Eso sí, la cerveza está por debajo de la mayoría de bebidas alcohólicas en cuanto a su aporte calórico.